En una revelación sorprendente de sus memorias recientemente publicadas, “107 Días”, la ex vicepresidenta Kamala Harris habla sobre un error político significativo del presidente Joe Biden que agitó olas dentro de la industria de los vehículos eléctricos (EV). Harris expresó su desacuerdo por haber excluido al CEO de Tesla, Elon Musk, de un evento sobre vehículos eléctricos en la Casa Blanca en 2021, calificándolo como un “gran error.”

Una Oportunidad Perdida en el Liderazgo de Vehículos Eléctricos

El evento, que tenía la intención de destacar el futuro de los vehículos eléctricos en Estados Unidos, se llevó a cabo en agosto de 2021 y contó con gigantes de la industria como General Motors, Ford, y Stellantis. Sin embargo, omitió notablemente a Tesla, el mayor fabricante de vehículos eléctricos del país. Harris manifestó su desconcierto ante esta decisión durante una conversación con la editora en jefe de Fortune, Alyson Shontell, enfatizando: “Quiero decir, aquí está él, el principal fabricante estadounidense de extraordinaria innovación en este campo.”

Alianzas Políticas y Vínculos Sindicales

La exclusión pareció estar vinculada a la política sindical, ya que las plantas de Tesla no están sindicalizadas. Mientras la Casa Blanca, a través de la entonces secretaria de prensa Jen Psaki, enfatizó el enfoque en las empresas asociadas a los Trabajadores Automotrices Unidos, la omisión planteó preguntas sobre las lealtades políticas que eclipsan el reconocimiento tecnológico. Harris señaló: “simplemente no tiene sentido” y argumentó que los logros tecnológicos deberían pesar más que las alianzas políticas.

La Reacción de Musk: Una Relación Enfriada

Musk no tomó a la ligera la exclusión, expresando en las redes sociales la rareza de la ausencia de Tesla y criticando posteriormente el enfoque sindical del gobierno. Su reacción inicial, junto con una relación cada vez más deteriorada, hizo que Musk se alineara con adversarios políticos, ilustrando el impacto a largo plazo de los gestos políticos. “Sí, parece extraño que Tesla no fuera invitada”, reflexionó Musk, capturando el sentimiento dentro de la comunidad tecnológica que favorece la inclusión y la innovación.

El Efecto Dominó en el Apoyo Político

Las repercusiones de la decisión se extendieron más allá del evento en sí. Musk más tarde se convirtió en un importante partidario del entonces presidente Donald Trump, contribuyendo con millones para los esfuerzos republicanos y apoyando a Trump para la elección subsiguiente. La narración de Harris sobre el incidente ilumina cómo los gestos políticos singulares pueden repercutir en alineaciones políticas más amplias.

Reflexiones del Ex Vicepresidente

En su comentario introspectivo, Harris llama a los líderes a trascender las fronteras políticas. “Los presidentes deben dejar de lado las lealtades políticas cuando se trata de reconocer la innovación tecnológica”, instó Harris. Su postura invita a una reflexión sobre priorizar la innovación sobre las afiliaciones políticas y establece un diálogo matizado sobre futuras decisiones con respecto al progreso nacional e industrial. Como se afirma en Fox News, este incidente no solo aisló a un jugador importante en la industria de los vehículos eléctricos, sino que también dio forma a las alianzas políticas de manera que pocos podrían haber anticipado.