Cuando pensamos en la magia detrás de algunas de las películas más icónicas, el nombre de Les Dilley viene a la mente. Tristemente, el director de arte y diseñador de producción ganador del Oscar nos ha dejado, falleciendo el 20 de mayo a la edad de 84 años. Como se indica en The Hollywood Reporter, su legado en el mundo del cine es nada menos que legendario.
Un Virtuoso Visual
La carrera de Les Dilley abarcó más de seis décadas, durante las cuales creó los paisajes visuales de más de 100 películas y proyectos de televisión, convirtiéndose en una de las figuras más respetadas en Hollywood. Su trabajo en Indiana Jones: En busca del arca perdida y Star Wars: Episodio IV – Una nueva esperanza le valió Premios de la Academia y solidificó su posición como un visionario en la dirección de arte.
Un Viaje Inolvidable Comienza
Nacido en Gales del Sur y mudándose a Londres después de la Segunda Guerra Mundial, la pasión de Dilley por el cine comenzó temprano. Su viaje comenzó con el estudio de arquitectura y perfeccionando sus habilidades como yesero en la Associated British Picture Corporation. A los 23 años, comenzó a contribuir en el clásico de James Bond Desde Rusia con amor, marcando el inicio de un ilustre camino en el diseño de producción.
Dando Forma a Mundos Icónicos
El talento creativo de Dilley fue crucial en la definición de la estética de clásicos perdurables. Colaborando con cineastas como George Lucas y Steven Spielberg, jugó papeles cruciales en la imagen de Star Wars, Superman, Alien y El Imperio Contraataca. Su ingenio no solo se veía sino se sentía, construyendo mundos que capturarían la imaginación durante generaciones.
Desafíos Únicos y Triunfos
Quizás uno de sus proyectos más desafiantes fue The Abyss de James Cameron, donde transformó una planta nuclear abandonada en un hipnotizante escenario submarino. Este esfuerzo no solo puso a prueba sus habilidades, sino que también lo posicionó como un maestro de su oficio. Él recordó una vez cómo esta experiencia fue un capítulo definitorio en su carrera.
Vida Personal y Legado
Fuera del set, Dilley era un hombre de familia con amor por el hockey sobre hielo y una cálida taza de té. Compartió su vida con su esposa Leslie y sus cuatro hijos. Su humor peculiar y dedicación a su oficio dejaron una marca indeleble, uniendo a colegas e inspirando a la siguiente generación de cineastas.
En el tapiz de la historia del cine, la obra de Les Dilley añade color y profundidad. Su visión y arte continúan influyendo e inspirando a muchos, dejando no solo películas, sino historias atemporales grabadas en nuestras mentes.